Jesucristo
¿Quien es Jesús?
- Dios encarnado
- Nació entre los años 8 y 4 a.C. en Belén, Judea (Palestina)
- Murió en una cruz, en Gólgota (o el Calvario o lugar de la Calavera)
- Resucitó al tercer día. Se manifestó ante sus discípulos, incluso ante más quinientos de ellos a la vez (1 Co 15:6)
- Jesús = Yesu, Yashua (hebreo) en griego, “Dios salva”
- Cristo = Christos, Mesías en griego, “el ungido”, un título
En sus treinta y tres años en la Tierra, Jesucristo obró cosas que nunca nadie había visto:
Caminó sobre las aguas.
Calmó la tempestad.
Sanó a los ciegos, los cojos y los enfermos.
Alimentó a miles de personas con cinco panes y dos pescados.
Incluso hizo resucitar a los muertos.
No vivó rodeado de gente religiosa, poderosa y elitista, sino que convivió con los marginados, los enfermos y los pecadores. Él experimentó las mismas necesidades y pruebas que nosotros enfrentamos: hambre, sed, fatiga, tentación, tristeza y rechazo.
Jesús fue carne y sangre, pero su vida entera fue una expresión concreta de Dios. Él invitó a los niños a cobijarse en sus brazos, se enojó con aquellos que hacían negocios en el templo de adoración, salvó las vidas de los marginados sociales, mostró amor y compasión hasta el fin de su vida. Cuando colgaba de la cruz, oró por sus opresores, se aseguró del cuidado de su madre y consoló al criminal crucificado a su lado.
Jesucristo no fue una persona más que nació en un punto de la historia. Fue mucho más que un gran líder espiritual. Él le enseñó a la gente acerca del reino de Dios y la manera de entrar en ese reino: a través de Él.
“Yo soy el camino, y la verdad, y la vida”, dijo (Jn 14:6). Él es la luz, la puerta y nuestro Pastor. Si lo hemos visto a Él, entonces hemos visto al Padre, que es Dios. “Creed en mí” dijo, “y nunca moriréis.”
¿Por qué? Porque Jesucristo es el Dios viviente y eterno. Jesús tiene el poder para perdonar pecados, sanar y condenar. Su dominio se ha extendido más allá de los espíritus, las fuerzas de la naturaleza, la vida y la muerte. “Antes que Abraham fuese, yo soy” dijo (Jn 8:58). Él es el Creador, presente desde el principio, y también el juez ante quien todas las almas deben comparecer.
¿Realmente Jesús fue Dios?